El trabajo, los hijos, las actividades extraescolares, el gimnasio… Hace que nuestro día a día sea muy ajetreado y que constantemente tengamos la sensación de que nos faltan horas al día y tiempo para preparar recetas ricas y saludables.
Una de las acciones más simples y efectivas que podemos utilizar para ahorrar tiempo y reducir el desperdicio de alimentos es el batch cooking.
Esta técnica no solo te ayuda a organizar tus comidas semanales, sino que también va muy relacionada con la filosofía zero waste (residuo cero), contribuyendo a un estilo de vida más sostenible.
A continuación, vamos a enseñarte cómo el batch cooking puede transformar tu vida culinaria. ¡Sigue leyendo porque esto te interesa!
¿Qué es el batch cooking?
El batch cooking es una técnica que consiste en preparar diferentes comidas de una sola vez y almacenarlas para usarlas a lo largo de la semana. Esta metodología no solo optimiza el tiempo en la cocina, sino que también facilita la adopción de una alimentación más sostenible y responsable.
Utilizar ingredientes de forma eficiente y planificar tus comidas con antelación te permitirá evitar el desperdicio y fomentar un estilo de vida más respetuoso con el medio ambiente.
Beneficios del batch cooking
Empezar a practicar el batch cooking te ofrecerá múltiples ventajas a tu vida diaria. Aquí te presentamos algunos de los beneficios más destacados:
- Ahorro de tiempo: cocinar varias elaboraciones una sola vez reduce el tiempo que pasas en la cocina cada día.
- Reducción de desperdicio: planificar tus comidas y preparar solo lo necesario ayuda a minimizar los restos de comida y evita que los ingredientes se echen a perder.
- Menor estrés: tener tus comidas listas con antelación elimina la presión de decidir qué cocinar diariamente y te permite disfrutar de una dieta equilibrada sin complicaciones.
- Ahorro económico: comprar ingredientes a granel y preparar comidas en grandes cantidades suele ser más económico que comprar comidas preelaboradas o comer fuera.
- Opciones saludables: al preparar tus propias comidas, tienes el control total sobre los ingredientes, lo que te permite elegir opciones más saludables y nutritivas.
Cómo empezar con el batch cooking
A continuación, te damos algunos consejos prácticos para iniciarte en el batch cooking:
- Planifica tus menús semanales: dedica tiempo a planificar tus menús para la semana. Elige recetas que se puedan preparar en grandes cantidades y que se conserven bien en el refrigerador o congelador.
- Haz lista de la compra: crea una lista de los ingredientes necesarios. Asegúrate de comprar solo lo que necesitas para evitar el desperdicio.
- Prepara varias elaboraciones: cocina porciones grandes de tus platos favoritos, como sopas, guisos o ensaladas. Divide las porciones en recipientes para almacenarlos adecuadamente.
- Utiliza envases adecuados: usa envases herméticos para almacenar tus preparaciones y mantenerlas frescas. Opta por alternativas reutilizables para reducir el uso de plásticos desechables.
- Etiqueta y almacena: etiqueta los envases con la fecha de preparación para saber cuánto tiempo llevan almacenados y organiza tu despensa o congelador para un acceso fácil y rápido.
Planificación de menús semanales
Para una planificación efectiva de tus menús semanales, es útil hacer una lista de tus comidas diarias. Incluye en ellas variedad de platos, como proteínas, carbohidratos y vegetales, para asegurar una dieta equilibrada. Piensa en preparar diferentes tipos de comidas, como almuerzos, cenas y meriendas, para tener opciones disponibles en todo momento.
Recetas fáciles para batch cooking
Te presentamos tres recetas fáciles para empezar con el batch cooking ideales para preparar en grandes cantidades y que se conservan bien durante la semana:
1. Sopa de lentejas
Ingredientes
- 1 taza de lentejas secas
- 1 cebolla picada
- 2 zanahorias en cubos
- 2 ramas de apio picadas
- 3 dientes de ajo picados
- 1 litro de caldo de verduras
- 1 lata de tomates triturados
- Sal y pimienta al gusto
- 1 cucharadita de comino
Preparación
- En una olla grande, sofríe la cebolla, las zanahorias, el apio y el ajo hasta que estén tiernos.
- Añade las lentejas, el caldo de verduras, los tomates triturados, la sal, la pimienta y el comino.
- Cocina a fuego lento durante aproximadamente 30 minutos, o hasta que las lentejas estén suaves.
- Deja enfriar y divide en recipientes. Almacena en el refrigerador o congela en porciones individuales.
2. Ensalada de quinoa con verduras
Ingredientes
- 1 taza de quinoa
- 2 tazas de agua
- 1 pimiento rojo en cubos
- 1 pepino en cubos
- 1 taza de tomates cherry cortados por la mitad
- 1/4 de taza de aceitunas negras en rodajas
- 1/4 de taza de queso feta desmenuzado
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharada de vinagre balsámico
- Sal y pimienta al gusto
Preparación
- Cocina la quinoa en agua hirviendo durante 15 minutos o hasta que esté tierna. Deja enfriar.
- Mezcla la quinoa cocida con el pimiento, el pepino, los tomates cherry, las aceitunas y el queso feta.
- Añade el aceite de oliva, el vinagre balsámico, la sal y la pimienta. Mezcla bien.
- Divide en recipientes y almacena en el refrigerador.
3. Guiso de pollo y verduras
Ingredientes
- 4 pechugas de pollo en cubos
- 2 patatas en cubos
- 2 zanahorias en rodajas
- 1 cebolla picada
- 1 taza de guisantes
- 1 litro de caldo de pollo
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal, pimienta y hierbas secas al gusto
Preparación
- En una olla grande, calienta el aceite de oliva y sofríe la cebolla hasta que esté dorada.
- Añade el pollo y cocina hasta que esté dorado.
- Agrega las patatas, zanahorias, guisantes y el caldo de pollo. Cocina a fuego lento durante 30 minutos o hasta que las verduras estén tiernas.
- Deja enfriar y divide en recipientes. Guarda en el refrigerador o congela para futuras comidas.
Puedes consultar este artículo sobre 5 recetas de verano fáciles y sanas para más ideas.
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Empezar a utilizar la técnica batch cooking no solo simplifica tus comidas; también te permite reducir el uso de plásticos de un solo uso.
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Empieza a practicar el batch cooking hoy mismo y descubre cómo esta técnica puede transformar tu rutina diaria, ahorrar tiempo, reducir desperdicios y promover un estilo de vida más sostenible. ¡Tu cocina y el planeta te lo agradecerán!