Tips para organizar los alimentos en la nevera

Reducir el desperdicio de alimentos se ha convertido en una prioridad mundial, tanto por razones económicas como ambientales. Una acción muy sencilla que podemos implementar en nuestro día a día consiste en aprender a colocar los alimentos en la nevera correctamente.

Con ello no solo lograremos alargar su vida útil, sino que también contribuiremos a un estilo de vida más sostenible y saludable.

A continuación, te ofrecemos una guía completa para organizar tu nevera de manera eficiente, asegurando la frescura de los alimentos y optimizando su conservación.

Echa un vistazo a nuestro artículo sobre alimentación sostenible: qué es y cómo adoptar hábitos de consumo responsable para más información.

 ¿Por qué es importante tener la nevera bien organizada?

Una nevera bien organizada no solo facilita el acceso a los alimentos, sino que también juega un papel muy importante en su conservación.

Colocar los alimentos de manera adecuada en la nevera asegura que cada tipo de comida se mantenga en la temperatura ideal, alargando su frescura. Además, una correcta organización evita que los alimentos se oculten en el fondo y se olviden, lo que a menudo lleva a desperdiciarlos.

Cómo colocar los alimentos en la nevera correctamente

Colocar los alimentos en la nevera debe hacerse teniendo en cuenta las diferentes zonas de temperatura y humedad.

Seguidamente, te ofrecemos una guía detallada sobre cómo distribuir los alimentos en tu nevera para maximizar su conservación.

Zona superior: alimentos listos para consumir

La parte superior de la nevera suele ser la más constante en temperatura, por lo que es ideal para almacenar alimentos que no requieren mucha refrigeración y están listos para comer.

10 ejemplos de lo que podrías colocar en esta zona:

  1. Tuppers de comidas
  2. Ensaladas preparadas
  3. Embutidos
  4. Quesos curados
  5. Yogures
  6. Postres
  7. Comida para llevar
  8. Salsas caseras
  9. Frutas cortadas
  10. Bebidas no perecederas (por ejemplo, jugos pasteurizados)

Zona intermedia: lácteos y alimentos cocinados

La zona intermedia de la nevera es perfecta para productos lácteos y alimentos ya cocinados que requieren una temperatura constante para mantenerse frescos.

Aquí tienes 10 ejemplos:

  1. Leche
  2. Queso fresco
  3. Mantequilla
  4. Natillas
  5. Flanes
  6. Platos cocinados
  7. Tofu
  8. Sobras de sopas
  9. Pudines
  10. Salsas y aderezos caseros

Zona inferior: carnes y pescados

La parte inferior de la nevera es la más fría y es ideal para almacenar carnes y pescados crudos, los cuales necesitan mantenerse a temperaturas más bajas para evitar la proliferación de bacterias.

10 ejemplos de alimentos para esta zona incluyen:

  1. Carne de ternera
  2. Pollo
  3. Pescado fresco
  4. Mariscos
  5. Carne de cerdo
  6. Carnes curadas
  7. Embutidos crudos
  8. Tofu fresco
  9. Hamburguesas caseras
  10. Pescado ahumado

Cajones: frutas y verduras

Los cajones de la nevera están diseñados para mantener un nivel de humedad adecuado para frutas y verduras, prolongando su frescura y evitando que se marchiten.

10 ejemplos de alimentos que se deben colocar en los cajones son:

  1. Zanahorias
  2. Lechugas
  3. Espinacas
  4. Brócoli
  5. Fresas
  6. Manzanas
  7. Naranjas
  8. Uvas
  9. Pimientos
  10. Pepinos

Puerta de la nevera: bebidas y condimentos

La puerta de la nevera es la zona menos fría y es adecuada para almacenar productos que no necesitan una refrigeración intensa.

Aquí tienes 10 ejemplos:

  1. Bebidas (agua, refrescos, jugos)
  2. Mantequilla
  3. Margarina
  4. Salsas comerciales
  5. Ketchup
  6. Mostaza
  7. Mermeladas
  8. Vinagres
  9. Aderezos para ensaladas
  10. Huevos

Errores comunes al colocar alimentos en la nevera

Uno de los errores más comunes es no prestar atención a las diferentes zonas de temperatura dentro de la nevera. Colocar alimentos en áreas incorrectas puede acelerar su deterioro.

Otro error frecuente es abarrotar la nevera, lo que impide la correcta circulación del aire frío y reduce la eficiencia de refrigeración.

Mantenimiento y limpieza regular de la nevera

Mantener la nevera limpia es esencial para la conservación de los alimentos. Se recomienda limpiar los estantes y cajones al menos una vez al mes con una solución de agua y vinagre.

Además, es importante revisar regularmente la nevera para desechar alimentos en mal estado y asegurarse de que las juntas de las puertas estén en buen estado para evitar escapes de aire frío.

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Siguiendo estos consejos sobre cómo colocar los alimentos en la nevera y utilizando los productos adecuados, podrás disfrutar de una mayor frescura de los alimentos, reducir el desperdicio y adoptar hábitos de alimentación más sostenibles y saludables.

 

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